Tenemos los recursos para eliminar el hambre, pero el acaparamiento y el autoritarismo pueden llevarnos a escenarios desastrosos.



Por Francisco Chapela/Estudios Rurales y Asesoría. 8 de julio de 2022.  Recientemente la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) dió a conocer El estado de la seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo 2022 (1). En este documento, la FAO reconoce que "Tras permanecer relativamente estable desde 2015, la prevalencia de la subalimentación se incrementó del 8,0% al 9,3% de 2019 a 2020 y creció a un ritmo más lento en 2021 hasta llegar al 9,8%." Esto significa que el objetivo de haber erradicado el hambre para el año 2030 (2) posiblemente no se logre.

La FAO reporta que desde el inicio de la pandemia se aumentó el número de personas con hambre en 150 millones, para llegar a un total de 978 millones de personas con hambre en la actualidad. Si comparamos las cifras de la gente con hambre con la COVID, que ha afectado hasta ahora a 553.5 millones de personas (2), el hambre el la peor pandemia, pues afecta a casi el doble de personas que la COVID. Pero parece preocupar mucho menos a los políticos y a los medios de comunicación.

Sin embargo, se ha estimado que si el maíz que se convierte en etanol, el aceite de palma que se convierte en biodiesel y otros cultivos que actualmente se utilizan para producir los llamados "biocombustibles" se emplearan para alimentar personas, podrían servir para alimentar a 1,900 millones de seres humanos (3); es decir, el doble de la población que la FAO estima que padece hambre. Si la producción actual de alimentos es suficiente para todos los seres humanos. Entonces ¿por qué tiende a aumentar la población con hambre en el mundo?

Una familia emaciada que llegó a Kolkata (antes Calcuta) buscando alimentos en noviembre de 1943.

En 1998 el premio Nóbel Amartya Sen dio una conferencia de prensa en la sede las Naciones Unidas y tocó el tema (4). Sen dijo que las hambrunas eran fáciles de prevenir, pero sucede que las dictaduras o los gobiernos coloniales suelen tener pocos incentivos para prevenirlas. Un gobierno democrático entiende que conviene no tener hambruna. Si uno revisa lo que pasa en los países que actualmente sufren de hambruna, se verá que no tienen una forma democrática de gobierno, dijo. La idea de vincular la hambruna a la dictadura nació de su propia experiencia, agregó.

Sen vivió la hambruna de Bengala en 1943, que implicó la muerte de tres millones de personas, a pesar de que --como hoy sucede a nivel mundial-- la producción de alimentos era más que suficiente. Estudios de la capacidad productiva de los suelos mostraron en 2019 que no fue la naturaleza, sino la política de guerra impulsada por el entonces primer ministro británico Wiston Churchill, la responsable de la hambruna y de esas muertes en Bengala, que era entonces colonia británica (5) (6).

En su conferencia en la ONU, Sen agregó que la ausencia de democracia no fue sólo una violación de los derechos humanos y la libertad política. También fue una gran violación de la seguridad de las personas en el sentido más básico: la seguridad de la supervivencia (4). La falta de una prensa activa y reporteros de investigación, hizo que no se dimensionara el tamaño del problema y el interés de controlar la información por parte del gobierno colonial, hizo que no se tomaran medidas a tiempo.

Desde la óptica de Amartya Sen, el informe de la FAO nos plantea la urgencia de revertir la tendencia actual de orientar los recursos para la agricultura y la alimentación que acaparan unas cuantas corporaciones industriales y financieras, hacia realmente alimentar a las personas. Esto sucederá en la medida en que se fortalezcan las democracias, tanto a nivel nacional e internacional, como a nivel local. Existen físicamente los recursos para eliminar el hambre. Lo que está creciendo es el déficit de democracia y el acaparamiento de esos recursos, con efectos sociales, culturales y ambientales que ya son desastrosos. 

Hoy padece hambre el doble de personas que las que padecen o han padecido COVID y no están encendidas las señales de alerta.



(1) Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) dió a conocer El estado de la seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo 2022

(2) ONU: La Asamblea General adopta la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. Nota de prensa. 25 de septiembre de 2015. 

(3) Henry Boucher: Global hunger fight means no biofuel. Reuters, June 6, 2022

(4) Press Conference by Nobel laureate Pofessor Amartya Sen. 15 October 1998. Press Briefing. United Nations Meetings Coverage and Press Releases 

(5) Michael Safi: Churchill's policies contributed to 1943 Bengal famine – study. The Guardian 29 Mar 2019

(6) Sandhya Ramesh: Proved by science: Winston Churchill, not nature, caused 1943 Bengal famine. The Print, India, 31 Mar 2019



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